Un varón de 78 años acudió con disfagia crónica y neumonía por aspiración recurrente. Sus antecedentes médicos incluían enfisema, caquexia, cardiopatía coronaria y tratamiento antiplaquetario activo (clopidogrel), lo que le situaba en alto riesgo de complicaciones quirúrgicas y hemorrágicas.
La evaluación endoscópica reveló un divertículo de Zenker de 3 cm, con retención significativa y acumulación de saliva y restos de comida (fig. 1). Se consideró que el paciente no era apto para la cirugía y se planificó una septotomía endoscópica.

Dr. Carsten Triller
Médico jefe, Gastroenterología
Hospital Municipal de Heinsberg GmbH

Figura 2: limpieza del divertículo

Figura 3: Tabique preparado

Figura 4: Exposición del ápice del tabique.